La historia de esta receta se remonta a 2005, cuando Morgane, una amiga bretona con la que me escribía desde hacía casi 10 años, decidió visitarnos y deleitarnos con sus
Crêpes salées y
sucrées (saladas y azucaradas). Si bien las
crêpes dulces se parecen mucho a las filloas gallegas (otro día os ponemos la receta tanto de las filloas como de las
crêpes sucrées), las saladas tienen la particularidad de estar hechas con
harina de trigo de sarraceno (o trigo negro), que no es habitual aquí. Por ese motivo, no había intentado prepararlas hasta ahora. Pero el otro día leí en un foro sobre cocina que se podía comprar el sarraceno en semillas en la sección de dietética del Corte Inglés (al parecer, no contiene gluten y por ello es apropiada para celíacos, puesto que no pertenece a la familia de las gramíneas sino a la de las poligonáceas) y me decidí a comprarlas y pulverizarlas con la Thermomix. Tras un primer intento, este es el resultado: rico, rico. ¡Gracias por la receta Morgane!
INGREDIENTES
- 250g de harina de sarraceno
- 1 huevo
- 500g de agua templada
- 2 cucharaditas de sal
- Leche (según se necesite)
- Jamón, queso, atún, huevo... para el relleno
PREPARACIÓN
- Si tenemos las semillas (y no la harina), las ponemos en el vaso de la Thermomix y las pulverizamos 30 segundos, velocidad progresiva 5-10.
- Cocemos la harina para que no resulte indigesta: 30 minutos, varoma, velocidad 3, sin el cubilete, para eliminar la humedad.
- Añadimos el resto de los ingredientes y mezclamos, 30 segundos, velocidad 5.
- Bajamos los restos con la espátula y volvemos a programar 30 segundos, velocidad 5.
- Dejamos reposar una hora en la nevera.
- Si la masa está demasiado espesa, rebajamos con leche. Como referencia, me hicieron falta 50g.
- Para crear las filloas, untamos la sartén bien caliente con aceite de oliva, matequilla o, como le llama Morgane, el antiadhesivo mágico: aceite de girasol con una yema de huevo; y vamos vertiendo la masa en la sartén con ayuda de un cucharón hasta que cuaje por un lado, le damos la vuelta y hacemos lo mismo por el otro lado.
- Después la rellenamos (en la propia sartén y una vez cuajada) con emmental, jamón y huevo (el huevo de vierte crudo y se cuaja encima de la filloa). Este es el relleno original, pero podéis probar también con queso y atún o cualquier otra combinación que os apetezca (la de la foto lleva queso, atún y pechuga de pavo).
Por supuesto, la mezcla se puede hacer utilizando la batidora en lugar de la Thermomix si ya tenemos la harina de sarraceno y no tenemos que pulverizarla. Lo que hizo Morgane cuando nos las preparó (y que yo he copiado) fue preparar todas las
crêpes primero en la sartén y después calentarlas mientras las rellenábamos ya en la mesa con una plancha/paellera eléctrica.
